En la primera visita la médico estético responsable realizará su historia clínica para determinar posibles contraindicaciones, y un diagnóstico específico en el que decidirá los parámetros del tratamiento indicados para su caso particular.
En la consulta de tratamiento con láser para reafirmación de la piel se comenzará por realizar una limpieza profunda y desinfección de la zona a tratar. A continuación, se tomarán las fotografías clínicas que permitirán valorar después los resultados del tratamiento.
La aplicación del láser no es dolorosa, por lo que no es necesario el uso de anestesia. Sólo se percibe una sensación de calor en la zona tratada, totalmente tolerable y en ocasiones incluso agradable.
Para realizar el tratamiento se marca la zona a tratar, y se va aplicando el láser de modo sistemático, con pases ordenados y sucesivos que van a ir elevando la temperatura gradualmente y que la van a mantener el tiempo suficiente para obtener los efectos deseados sobre la dermis.
La sesión de tratamiento dura unos 30-45 minutos, dependiendo de cada paciente y sus necesidades. Una vez concluida la sesión, se aplicará un tratamiento antiinflamatorio o regenerador de dermis y epidermis.
Se le informará a la paciente de las pautas de cuidado a seguir que incluirán evitar las exposiciones solares prolongadas, el uso de un protector solar y el mantenimiento de un adecuado grado de hidratación de la piel tratada. La reincorporación a la vida laboral y social tras el tratamiento es inmediata. Finalmente, se procederá a concertar con la paciente una cita para su revisión.